Hace unos días, estando con mi vecina en pleno café, me dió unas clases rápidas de como hacer flores con cremalleras. Al llegar a casa, puse en práctica lo teóricamente aprendido y creo que no me han salido nada mal. Eso quiere decir dos cosas: que ella es muy buena profesora y que yo soy una alumna inmejorable ¿o no, vecina?.
Creo que los usaré para hacer algún que otro regalo de Navidad.
¡Lo que da de sí un buen café!
3 comentarios:
Pues va a ser que eres una alumna fantástica ... te han quedado preciosos....
Eso es que la "teacher" lo explico de maravilla.
Desde luego que sí, el café os dió para mucho, jeje.
Unos brches muy originales.
Ojalá tuviera yo una vecina así.
Un abrazo
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